Hablar de Matthew Barney es referirse a uno de los artistas visuales más extravagantes del último tiempo.
Su obra más famosa e incomprendida , Cremaster, ha sido objeto de todo tipo de comentarios, desde las críticas más desafiantes hasta las más elogiosas. En ella, tan sólo el nombre llama la atención y justamente es eso lo que da la pauta para poder comprenderla. Cremaster ( http://www.cremaster.net/) es el músculo que se encuentra en el pliegue de la ingle y las bolsas testiculares, que permite retraer los testículos. La obra, por lo tanto, pasa por una serie de estados exploratorios, donde se experimenta el equilibrio, el quiebre, movimientos no secuenciales y también las pulsiones sexuales. Cremaster son cinco series de películas (y diseños, ropas, dibujos, esculturas utilizados en la filmación) -que no necesitas ver en orden cronológico-, donde Barney introduce muchos elementos surrealistas, oníricos y también de su vida personal. Él mismo encarna ciertos personajes.
Los filmes buscan interrogar acerca de una serie de temas poco abordados como la clonación, caza de ballenas, el rol maternal de la mujer o qué es ser realmente un hombre. Barney es testigo vigilante de la vida del espectador. Oriundo de San francisco nos lleva a un universo violento y sofisticado, a ratos virginal, barroco y extremadamente sintético, ¿rara mezcla, verdad? Es el sello personal de Matthew Barney.
No comments:
Post a Comment
Note: only a member of this blog may post a comment.